Matías Irles, campeón panamericano del tiro al arco
La flecha del Robin Hood chileno apunta al deporte nacional
El mejor exponente chileno de esta desconocida disciplina en el país cuenta algunas de las experiencias que le ha tocado vivir en este ámbito. Y, además hace una fuerte crítica al poco incentivo y apoyo de las autoridades a los deportistas nacionales.
Por Alejandra Gárate Schulze
Han pasado 10 años desde que Matías tomó por primera vez el arco y la flecha. Hoy es un joven de 21 años de carácter cordial y gran desplante, que gracias a su tenacidad y esfuerzo ha llegado lejos. Desde muy pequeño demostró su interés por cualquier tipo de deporte, pasando por el remo, el básquetbol y la natación, entre otros. Sin embargo, el tiro al arco fue el que más le interesó, llegando en poco tiempo a ser el mejor en su categoría.
El tiro al arco es un deporte que tiene poca difusión en Chile. Éste consiste en disparar flechas con un arco sobre una diana. Para ello, se necesita de gran precisión y concentración; además se debe contar con un equipo adecuado de arcos, flechas y estabilizadores, entre otros, que tienen un alto valor en el mercado. Esta puede ser una de las razones por la cual pocas personas lo practican, y por ende es ignorado.
El currículum deportivo de Irles es digno de un deportista de elite. Fue campeón americano juvenil en Merliot, El Salvador en el 2002 y campeón continental juvenil en Medellín, Colombia el año 2003. Asimismo, posee la mejor marca efectuada por un chileno en el extranjero en el Campeonato del Mundo, en Nueva Cork. En esa oportunidad quedó dentro de los 10 mejores de América, y 105 del mundo. Todos estos títulos junto a muchos otros de similar importancia, lo han ubican como el campeón de Chile en la categoría olímpica.
Recorriendo las canchas de tiro del Estadio Español de Viña del Mar, lugar donde suele entrenar, reconoce estar un tanto alejado de una de sus grandes pasiones. Esto se debe principalmente a que debe combinar los exhaustivos entrenamientos con los estudios universitarios. En la actualidad Irles estudia ingeniería en la Universidad Federico Santa María. Sin embargo, afirma que, de haber estado en otro país donde el apoyo fuese mayor se hubiese dedicado con mayor entrega a este deporte que tantas gratificaciones le ha dado.
- ¿Cómo llegaste a practicar este deporte tan poco conocido en Chile?
- Un día mi papá me trajo a estas mismas canchas y cuando probé me gusto de inmediato. Me atrajo eso de tener que achuntarle a algo y estar realmente concentrado para lograrlo. Lo interesante de este deporte es el nivel de concentración que se debe tener.
- ¿El nivel de exigencia de éste es muy alto?
- Se necesitan de varias horas de entrenamiento para llegar a ser realmente bueno, por eso es exigente este deporte. Este mismo factor hace que un grupo de no más de cien personas realicen el tiro al arco constantemente, porque hay que estar dispuesto a dedicarle más tiempo de lo que otros deportes exigen.
- ¿Cuáles han sido las principales trabas que has tenido como deportista?
- Las principales fueron las de no contar con un sistema armado y ordenado donde se pudiera entrenar de forma seria y profesional. Siempre fue gracias a mi papá que pude contar con un entrenador y con medios para entrenar, pero así y todo nunca hubo un sistema donde hubiera ciertos lineamientos. En general, la gente del deporte en Chile no tiene las cosas muy claras, es por eso que aunque entrenen no se sacan buenos resultados.
- ¿Qué le criticarías al deporte chileno en cuanto al poco incentivo y promoción de algunos deportes como el que tú practicas?
- Yo creo que el deporte chileno está enfocado solamente al fútbol. El problema es que con eso se deja de lado un montón de posibilidades, los chilenos sí somos buenos para los deportes. Sin embargo, en los dirigentes, en los que “rayan la cancha”, radican las mayores dificultades. Ellos son los que no tienen una visión clara. Por culpa de las malas decisiones de arriba, son los deportistas los perjudicados.
Políticas erróneas
Matías reconoce abiertamente que, sin bien su esfuerzo y talento lo han ayudado, la condición económica de su familia lo han llevado a ganar importantes títulos deportivos y reconocimiento en el exterior. Sin embargo, para muchos otros deportistas la situación no es la misma que la suya.
- El tiro al arco es un deporte costoso, ¿Recibes ayuda de alguna institución o el dinero sale de tu bolsillo?
- (Ríe). La verdad es que no precisamente de mi bolsillo, pero si del de mi papá. Mi familia siempre ha estado presente económica y emocionalmente a lo largo de toda mi carrera. Gracias a mis padres, yo he podido viajar, tener la indumentaria necesaria y entrenadores de gran nivel.
- Esto refleja que en Chile existen muchos jóvenes con tanto potencial como tú, pero dada la condición económica no pueden perfeccionarse. ¿Qué opinas al respecto?
- Es triste, pero es una realidad. Yo sé que soy un afortunado, he tenido la oportunidad de viajar a otros países y de ver otras realidades. En Chile hay mucho por hacer, mucho que avanzar. Con un panorama como éste es súper difícil ser deportista, ya que el apoyo es mínimo. Es cosa de ver que los que han llegado lejos es porque han tenido la ayuda económica de sus cercanos, no del Estado como debiera ser.
- Entonces, ¿Qué crees que se debería hacer?
- Siempre se está hablando que se implementarán nuevas políticas al respecto, pero al parecer ellas quedan sólo en las oficinas de las autoridades. Existen muchas políticas erróneas que no contribuyen con el deporte. En los centros de entrenamiento, es donde realmente se aprecian las carencias del deporte nacional y las mejoras que se deben implementar. Cuando no se piensa según la realidad del deportista no se pueden hacer grandes mejoras. Hay que solucionar los problemas reales con medidas reales.
- ¿Cuál es la posición de un deportista de elite como tú frente al problema surgido en Chiledeportes?
- Es una vergüenza como país. No se pueden desviar los fondos con los que cuentan los deportistas a otras causas, la corrupción le hace un daño enorme a las futuras promesas del deporte, generándoles problemas que son culpa de una visión poco clara y generalmente equivocada de “los de arriba”.
La flecha del Robin Hood chileno apunta al deporte nacional
El mejor exponente chileno de esta desconocida disciplina en el país cuenta algunas de las experiencias que le ha tocado vivir en este ámbito. Y, además hace una fuerte crítica al poco incentivo y apoyo de las autoridades a los deportistas nacionales.
Por Alejandra Gárate Schulze
Han pasado 10 años desde que Matías tomó por primera vez el arco y la flecha. Hoy es un joven de 21 años de carácter cordial y gran desplante, que gracias a su tenacidad y esfuerzo ha llegado lejos. Desde muy pequeño demostró su interés por cualquier tipo de deporte, pasando por el remo, el básquetbol y la natación, entre otros. Sin embargo, el tiro al arco fue el que más le interesó, llegando en poco tiempo a ser el mejor en su categoría.
El tiro al arco es un deporte que tiene poca difusión en Chile. Éste consiste en disparar flechas con un arco sobre una diana. Para ello, se necesita de gran precisión y concentración; además se debe contar con un equipo adecuado de arcos, flechas y estabilizadores, entre otros, que tienen un alto valor en el mercado. Esta puede ser una de las razones por la cual pocas personas lo practican, y por ende es ignorado.
El currículum deportivo de Irles es digno de un deportista de elite. Fue campeón americano juvenil en Merliot, El Salvador en el 2002 y campeón continental juvenil en Medellín, Colombia el año 2003. Asimismo, posee la mejor marca efectuada por un chileno en el extranjero en el Campeonato del Mundo, en Nueva Cork. En esa oportunidad quedó dentro de los 10 mejores de América, y 105 del mundo. Todos estos títulos junto a muchos otros de similar importancia, lo han ubican como el campeón de Chile en la categoría olímpica.
Recorriendo las canchas de tiro del Estadio Español de Viña del Mar, lugar donde suele entrenar, reconoce estar un tanto alejado de una de sus grandes pasiones. Esto se debe principalmente a que debe combinar los exhaustivos entrenamientos con los estudios universitarios. En la actualidad Irles estudia ingeniería en la Universidad Federico Santa María. Sin embargo, afirma que, de haber estado en otro país donde el apoyo fuese mayor se hubiese dedicado con mayor entrega a este deporte que tantas gratificaciones le ha dado.
- ¿Cómo llegaste a practicar este deporte tan poco conocido en Chile?
- Un día mi papá me trajo a estas mismas canchas y cuando probé me gusto de inmediato. Me atrajo eso de tener que achuntarle a algo y estar realmente concentrado para lograrlo. Lo interesante de este deporte es el nivel de concentración que se debe tener.
- ¿El nivel de exigencia de éste es muy alto?
- Se necesitan de varias horas de entrenamiento para llegar a ser realmente bueno, por eso es exigente este deporte. Este mismo factor hace que un grupo de no más de cien personas realicen el tiro al arco constantemente, porque hay que estar dispuesto a dedicarle más tiempo de lo que otros deportes exigen.
- ¿Cuáles han sido las principales trabas que has tenido como deportista?
- Las principales fueron las de no contar con un sistema armado y ordenado donde se pudiera entrenar de forma seria y profesional. Siempre fue gracias a mi papá que pude contar con un entrenador y con medios para entrenar, pero así y todo nunca hubo un sistema donde hubiera ciertos lineamientos. En general, la gente del deporte en Chile no tiene las cosas muy claras, es por eso que aunque entrenen no se sacan buenos resultados.
- ¿Qué le criticarías al deporte chileno en cuanto al poco incentivo y promoción de algunos deportes como el que tú practicas?
- Yo creo que el deporte chileno está enfocado solamente al fútbol. El problema es que con eso se deja de lado un montón de posibilidades, los chilenos sí somos buenos para los deportes. Sin embargo, en los dirigentes, en los que “rayan la cancha”, radican las mayores dificultades. Ellos son los que no tienen una visión clara. Por culpa de las malas decisiones de arriba, son los deportistas los perjudicados.
Políticas erróneas
Matías reconoce abiertamente que, sin bien su esfuerzo y talento lo han ayudado, la condición económica de su familia lo han llevado a ganar importantes títulos deportivos y reconocimiento en el exterior. Sin embargo, para muchos otros deportistas la situación no es la misma que la suya.
- El tiro al arco es un deporte costoso, ¿Recibes ayuda de alguna institución o el dinero sale de tu bolsillo?
- (Ríe). La verdad es que no precisamente de mi bolsillo, pero si del de mi papá. Mi familia siempre ha estado presente económica y emocionalmente a lo largo de toda mi carrera. Gracias a mis padres, yo he podido viajar, tener la indumentaria necesaria y entrenadores de gran nivel.
- Esto refleja que en Chile existen muchos jóvenes con tanto potencial como tú, pero dada la condición económica no pueden perfeccionarse. ¿Qué opinas al respecto?
- Es triste, pero es una realidad. Yo sé que soy un afortunado, he tenido la oportunidad de viajar a otros países y de ver otras realidades. En Chile hay mucho por hacer, mucho que avanzar. Con un panorama como éste es súper difícil ser deportista, ya que el apoyo es mínimo. Es cosa de ver que los que han llegado lejos es porque han tenido la ayuda económica de sus cercanos, no del Estado como debiera ser.
- Entonces, ¿Qué crees que se debería hacer?
- Siempre se está hablando que se implementarán nuevas políticas al respecto, pero al parecer ellas quedan sólo en las oficinas de las autoridades. Existen muchas políticas erróneas que no contribuyen con el deporte. En los centros de entrenamiento, es donde realmente se aprecian las carencias del deporte nacional y las mejoras que se deben implementar. Cuando no se piensa según la realidad del deportista no se pueden hacer grandes mejoras. Hay que solucionar los problemas reales con medidas reales.
- ¿Cuál es la posición de un deportista de elite como tú frente al problema surgido en Chiledeportes?
- Es una vergüenza como país. No se pueden desviar los fondos con los que cuentan los deportistas a otras causas, la corrupción le hace un daño enorme a las futuras promesas del deporte, generándoles problemas que son culpa de una visión poco clara y generalmente equivocada de “los de arriba”.
1 comentario:
eres mi amor platónico me encantó tu entrevista :D
atte.
coto!
Publicar un comentario